Desde la Reserva Nacional Altos de Lircay y el Parque
Nacional Radal Siete Tazas, hasta los valles cordilleranos de Romeral, San
Clemente, Longaví y Molina, la cordillera del Maule concentra un potencial
turístico aún poco explorado. Con el objetivo de transformar estos paisajes en
un motor de desarrollo regional, se presentó el diseño de una estrategia que
busca fortalecer el turismo de montaña a través de una planificación de largo
plazo.
La iniciativa fue liderada por el Centro de Competitividad
del Maule de la Facultad de Economía y Negocios (FEN) de la Universidad de
Talca, a través del Fondo de Innovación para la Competitividad Regional (FlC-R)
y culminó con la entrega del diseño del Clúster de Turismo de Montaña al
Gobierno Regional del Maule.
Este trabajo permitió construir una hoja de ruta que integra
una propuesta de política pública subnacional, un plan maestro de acción y un
modelo de gobernanza, orientados a ordenar y proyectar el desarrollo del
turismo de montaña en la región, abarcando todo el eje cordillerano andino
desde Romeral hasta Longaví.
“La cordillera del Maule tiene un enorme potencial, pero
sigue siendo poco conocida incluso por operadores turísticos nacionales e
internacionales. Esto se traduce en una baja productividad y competitividad de
un sector que es emergente, pero estratégico para el desarrollo regional. Con
este clúster buscamos articular a los distintos actores del territorio y
avanzar hacia una mejor gobernanza del turismo de montaña”, explicó Jorge
Navarrete Bustamante, director del Centro de Competitividad del Maule y académico
de la FEN UTalca.
De acuerdo con el académico, el proyecto se ejecutó durante
dos años y surgió a partir de la necesidad de enfrentar la baja visibilidad y
fragmentación del sector, pese a las condiciones naturales de la cordillera
maulina. A través de un trabajo colaborativo, se convocó a emprendedores
turísticos, servicios públicos, municipios, academia y otros actores del
territorio, con el fin de identificar brechas, oportunidades y prioridades para
fortalecer esta actividad económica emergente.
Por su parte, el representante de los guías turísticos de la
región y presidente del Clúster, Andrés Valdebenito, destacó la importancia de
la articulación. “Para nosotros es fundamental estar agrupados, especialmente
con otras instituciones que nos permiten mejorar nuestra red social. La
gobernanza no es solo un discurso, es llegar a las bases y a las comunidades.
Si logramos involucrarlas y mejorar las economías locales, también mejoramos la
calidad del turismo y el desarrollo del territorio”, expresó.
Desde el Gobierno Regional, el consejero regional por la
provincia de Talca, Gonzalo Montero, valoró el trabajo desarrollado y destacó
su proyección en materia de inversión y desarrollo.
“Levantar esta información es sumamente importante, porque
nos permite mostrar los atractivos que tiene la región del Maule. Queremos
avanzar en proyectos de infraestructura y capacitación, con el fin de poner en
valor toda la cordillera”, destacó Montero.
Cabe destacar que el trabajo también considera vínculos de
cooperación con emprendedores y actores turísticos de la provincia de Malargüe,
en Argentina, abriendo oportunidades de integración binacional en el desarrollo
del turismo de montaña.
“Ahora el desafío es implementar este trabajo y darle
continuidad en el tiempo. El clúster deja una base sólida para que el turismo
de montaña pase de un potencial poco explorado a una actividad capaz de generar
desarrollo, empleo y mejor calidad de vida en la región”, finalizó Jorge
Navarrete Bustamante.

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