Cada año, el tercer viernes de marzo se conmemora el Día Mundial del Sueño, una iniciativa de la World Sleep Society que busca concientizar sobre la importancia de un descanso adecuado para la salud y el bienestar. Dormir bien no es un lujo ni una pérdida de tiempo; es una necesidad biológica fundamental para el funcionamiento del cuerpo y la mente.
Los especialistas advierten que la privación del sueño puede
generar fatiga, afectar el sistema inmunológico, aumentar el riesgo de
enfermedades crónicas y perjudicar la estabilidad emocional. "El descanso
adecuado es fundamental para la recuperación física y mental. Si se descansa
bien, las cosas afectan de otra manera o incluso no afectan", explicó el
neurólogo Alejandro Andersson, director del Instituto de Neurología Buenos
Aires (INBA).
Los 9 beneficios del sueño para la salud
De acuerdo con la Sleep Foundation, la Escuela de Medicina
de Harvard y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC),
estos son los principales beneficios del sueño:
Fortalece el sistema inmunológico: Durante el sueño, el
cuerpo produce citocinas, proteínas esenciales para combatir infecciones y
reducir inflamaciones.
Regula las emociones y reduce el estrés: Un descanso
adecuado mejora la capacidad de afrontar problemas y regula la intensidad de la
angustia.
Mejora la memoria y el aprendizaje: El sueño consolida la
memoria y refuerza las conexiones neuronales, facilitando el aprendizaje.
Protege el corazón: Dormir bien reduce la presión arterial y
la frecuencia cardíaca, disminuyendo el riesgo de enfermedades
cardiovasculares.
Regula el metabolismo y el peso corporal: El sueño equilibra
las hormonas del apetito, ayudando a prevenir la obesidad y la diabetes tipo 2.
Previene enfermedades neurodegenerativas: Un buen descanso
permite eliminar toxinas cerebrales, reduciendo el riesgo de deterioro
cognitivo y demencias.
Reduce el riesgo de ciertos tipos de cáncer: Estudios
indican que dormir bien protege contra el desarrollo de cáncer colorrectal y
otros tipos de tumores.
Mejora el rendimiento físico y la recuperación muscular:
Durante el sueño, el cuerpo produce hormonas esenciales para la reparación
muscular.
Aumenta la esperanza y calidad de vida: Un descanso adecuado
mejora el estado de ánimo, la productividad y la capacidad de concentración.
¿Cuántas horas se deben dormir?
La cantidad de sueño recomendada varía según la edad. Según
los expertos:
Recién nacidos (0-3 meses): 14-17 horas
Bebés (4-12 meses): 12-16 horas
Niños pequeños (1-5 años): 10-14 horas
Niños en edad escolar (6-12 años): 9-12 horas
Adolescentes (13-18 años): 8-10 horas
Adultos (18-64 años): 7-9 horas
Adultos mayores (65+ años): 7-8 horas
Consejos para mejorar la calidad del sueño
Los CDC y la Sleep Foundation recomiendan adoptar hábitos
saludables para optimizar el descanso:
Mantener una rutina estable de sueño, acostándose y
despertándose a la misma hora todos los días.
Crear un ambiente adecuado para dormir, asegurando un
dormitorio oscuro, fresco y silencioso.
Apagar dispositivos electrónicos al menos 30 minutos antes
de acostarse para evitar la exposición a la luz azul.
Evitar comidas pesadas y cafeína por la noche.
Hacer ejercicio regularmente, pero no justo antes de dormir.
Consultar a un especialista si se presentan problemas
persistentes para dormir.
En este Día Mundial del Sueño, los expertos recuerdan que
priorizar el descanso nocturno y adoptar hábitos saludables puede marcar una
gran diferencia en la calidad de vida y la salud general.
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